PRIMER CHAKRA
Nombre en sánscrito: Muladhara
Significado: Raíz
Elemento: Tierra
Color: Rojo
Derecho: Tener
Principio: Gravedad
Símbolo: Loto de 4 pétalos.
Ubicación: Entre el ano y los genitales, unido al hueso coxal abriéndose hacía abajo. Base de la raquis, plexo coxígeo, piernas, pies, intestino grueso.
Tema principal:
La supervivencia, la estabilidad, el arraigo, la prosperidad, la vida confortable y la salud física.
Este punto energético nos une al mundo físico, la energía de la tierra fluye a través de él, uniendonos a la madre Tierra. Las necesidades de fundamentales y de supervivencia son regidos por este chakra. Representa nuestras raíces, nuestro fundamento, nuestro cuerpo y supervivencia.
Consolidar ese fundamento mediante raíces que sean sólidas y profundas, un organismo fuerte y lleno de salud y la estabilidad en nuestra vida.
El significado literal de Muladhara es raíz. La planta que crece lozana y fuerte necesita raíces robustas y bien plantadas en el rico sustrato de la tierra. A sí mismo como las raíces crecen hacía abajo, nuestra energía y conciencia corporal la debemos enfocar en hacía abajo hasta la espina dorsal, pasando por las piernas y los pies, hacía abajo del vientre, buscando nuestras raíces ancestrales, este chakra esta totalmente ligado a nuestro cuerpo físico, nuestro cuerpo tangible, representa la materia en la forma más densa y pesada.
Para manifestar debemos reunir las cosas en un mismo lugar y la capacidad de sobre-vivencia y prosperidad dependen de esa capacidad de manifestar nuestras necesidades, pensamientos y deseos, para esto es necesario concretarlos con exactitud.
EL CUERPO:
Nuestro cuerpo refleja todo lo que es el primer chakra, la manifestación física de todo lo que nos ocurre, nuestra salud, como nos alimentamos, el ejercicio que realizamos y la interacciones físicas con el resto del mundo. Preguntémonos: ¿Qué sensaciones evoca nuestro cuerpo?, ¿Nos sentimos despiertos y activos o embotados y fatigados?.
El entender nuestro primer chakra nos lleva a sanar nuestro cuerpo, así como nuestra interacción con el mundo y como desempeñamos nuestra conciencia. No es un trabajo fácil, sin embargo vale mucho la alegría re-conectar desde nuestro cuerpo físico para reconquistar y empezar la curación y la activación de los otros chakras, todo empieza desde la base.
Dificultades del pasado para este primer chakra:
Nuestro desarrollo inicial es clave para que este chakra este en armonía. Por ejemplo, si nuestra madre tuvo inconvenientes en el parto, tomo medicinas o demasiadas vitaminas, su relación con el ser madre, el grado de dilatación abdominal, y claro el parto mismo, todo esto tiene impacto en nuestro primer chakra. Ya que un parto traumático nos dificulta nuestra entrada y relación con nuestro cuerpo físico. También temas de separaciones de los padres justo después de nuestro nacimiento, o el aislamiento prematuro del niño a su madre en las clínicas.
Enfermedades:
Cuando hay enfermedades como la obesidad, hemorroides, estreñimiento, ciática, anorexia, lesiones de la rodilla, alteraciones óseas, complexión enfermiza en general, carácter timorato, incapacidad para concentrarse, agitación es porque su energía esta bloqueada.
Curando el primer chakra:
Retornar y volver a nuestro < niño interior>, recordar y reconstruir vivencias de acogida feliz, bienvenida y creación de vínculos que debieron ocurrir en ese momento inicial de nuestra vida. Las siguientes afirmaciones ayudan a recrear esas vivencias con amor, para sanar nuestro primer chakra.
- Bienvenido, te esperábamos.
- Nos alegramos que hayas llegado y estés ahora con nosotros.
- Hemos preparado un lugar especial para ti.
- Aquí estarás seguro, segura.
- Todas tus necesidades serán atendidas.
- Tienes un cuerpo maravilloso.
- Eres un ser único y necesario.
- Gracias por tu llegada.
Dependiendo del grado de dificultas que tengamos con nuestro primer chakra será necesario un terapeuta, una mano amiga, terapias alternativas, para lograr un acercamiento y un desbloqueo.
Para lograr un sensación de seguridad y crear un primer chakra solido, para tener confianza en que nosotros somos capaces de manifestar lo que nos hace falta para sobrevivir.
